Ryoui Minagawa es un auténtico mito viviente. Autor de Spriggan, Kyô y Project arms, extrañamente no ha gozado en occidente del éxito y el prestigio cosechado en su país. De 2006 es este D-live (doraibu), en 15 volúmenes.
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SINOPSIS:
Satoru Ikagura es un chaval de 17 años con un trabajo muy peculiar: pertenece a la Almigthy Support Enterprise (empresa de soporte todopoderoso), una agencia multinacional que recluta a lo más granado en todos los campos. Él, en concreto, es el legendario multipiloto, capaz de conducir cualquier vehículo, además de ser el miembro más joven de la agencia.
VALORACIÓN PERSONAL:
No deja de sorprenderme la capacidad de los japoneses para inventar historias alternativas. Lo normal sería contar la historia de un fantástico disparador, un experto en artes marciales, un magnífico pensador que usara la lógica para resolver misterios… Ryouji Minagawa cuenta la historia de un piloto. Aprovechando su pasión por los vehículos de motor, Minagawa sumerje a Ikagura en las más intrincadas misiones.
Y no es fácil… Idear situaciones en las que alguien con capacidades conductoras sea el protagonista no es nada fácil. Porque recurrir a los tanques y a los cazas de combate, es sencillo. Pero cuando la misión es rescatar a unos científicos de una cueva donde ha habido un desprendimiento, y donde además tienen que saltar una zona de aguas electrificadas… con una pala excavadora y un camión de bomberos… Tiene su mérito.
Además, las escenas de acción están magníficamente conseguidas. Cuando Ikagura se pone a los mandos de algún vehículo, le cambia por completo la expresión, deja de tener cara de pamplina y dice “vas a cobrar vida en mis manos, chaval”. A partir de ahí, la historia se vuelve vertiginosa, y es una delicia ver cómo va consiguiendo salir adelante con los medios de que dispone.
VALORACIÓN:
Tiene un cierto parecido a Planetes, lo cual no me agradó mucho al principio. Pero cuando te metes en la historia, es un manga que se disfruta mucho. El argumento está currado, y el dibujo es fantástico. Recomendable.
Valoración: 8/10.
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