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New Don. Old Tricks?
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Mad Men
(T6)
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| Título original | | Mad Men |
| Nacionalidad | | Estados Unidos de América |
| Año | | 2013 |
| Género | | Drama |
| Formato | | Color |
| Duración | | 60 |
| Director | | Phil Abraham, Lesli Linka Glatter |
| Guión | | Matthew Weiner |
| Fotografía | | Chris Manley |
| Música | | David Carbonara |
| Producción | | Emitida por la cadena AMC |
| Reparto | | Jon Hamm, Elisabeth Moss, Vincent Kartheiser, January Jones, Christina Hendricks, John Slattery, Robert Morse, Michael Gladis, Aaron Staton, Rich Sommer, Maggie Siff, Kiernan Shipka, Mark Moses, Talia Balsam, Christopher Stanley, Carla Gallo, Alexa Alemanni, Deborah Lacey, Jessica Paré, Randee Heller, Kevin Rahm, Julia Ormond, James Wolk, Harry Hamlin, Kevin Rahm, Teyonah Parris, Mason Vale Cotton, Ben Feldman |
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| Sinopsis | Serie dramática que narra los comienzos de una de las más prestigiosas agencias de publicidad de los años sesenta, y centrada en uno de los más misteriosos, pero con un gran talento, ejecutivos de la firma, Donald Draper.
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| Crítica | 
Puntuación
del crítico: 10 |
Cuando los directivos de AMC llegaron a un acuerdo con Mathew Weiner para seguir con la serie hasta 2014 y le soltaron un pastizal por ello hubo muchas bocas que criticaron la ‘avaricia’ del señor Weiner ya que perjudicó al presupuesto de otros shows de la cadena.
Bien, pues tras ver lo conseguido en la quinta temporada (pese al castigo de los premios, que la ignoraron, un temporadón) y la sexta que acaba de terminar, afirmo que el creador de esta obra maestra se merece cada centavo que le dieron y se quedaron cortos. Porque esto es historia de la televisión que incrementa su mito con cada paso que da y no deja de reivindicarse como el drama mejor escrito de la actualidad.
Esta temporada me ha vuelto loco, creo que es una de las mejores de la serie. Semana tras semana no había episodio en el que no volviese a repetir alguna escena o diálogo, incluso hay capítulos que he visto un par de veces. Hasta ese punto me obsesiona "Mad Men".
El ambiente sociopolítico de la época está perfectamente integrado y aprovechado para el desarrollo de tramas. Es 1968, la era del movimiento hippy, de los disturbios en las calles por los derechos humanos y la guerra del Vietnam en su punto álgido.
Acontecimientos como el asesinato de Martin Luther King o Bobby Kennedy, la Convención Nacional Demócrata o el estreno de películas como “El planeta de los simios” o “La semilla del diablo” desembocan en capítulos magistrales.
Argumentalmente, los cambios en la empresa han dado muchísimo juego. Desde la competencia desleal que se hacen en los primeros episodios las agencias de Don y Peggy (genial esa presentación para la cuenta de ‘Ketchup’) hasta la sorprendente fusión entre ambas que abre un mundo nuevo de posibilidades.
Me ha encantado la inclusión en la serie de personajes como Ted Chaough o Jim Cutler, aportan frescura, son magnéticos, interesantes y están fantásticamente interpretados por Harry Hamlin y Kevin Rahm.
Otro que no tiene desperdicio es Bob Benson, jugando con el espectador durante toda la temporada por saber quién es y cuáles son sus intenciones. Finalmente descubierto por Pete Campbell, Benson se revela como una versión joven de Draper, un manipulador y un mentiroso, un trepa que hará lo que sea para ascender en el negocio.
Para Don Draper esta ha sido la temporada del descenso total a los infiernos, de esa caída en picado en la que lleva desde que empezó la serie. Es el Draper que conocemos: lujurioso, irresponsable, farsante y alcohólico pero todo elevado a la máxima potencia. Los flashbacks de la infancia de Don nos han hecho comprender algo más del porqué de su trato con las mujeres y del tormento interior que sufre.
Han sido frecuentes las referencias al suicidio (en toda la serie pero sobretodo en ésta temporada) y la muerte, hasta el punto de que un final que no acabase en tragedia era casi impensable para el espectador.
Por eso la Season finale ha resultado tan redonda y conmovedora, el momento de la presentación de ‘Chocolate Hershey’ nos permite ver a Don Draper y a Dick Whitman en una misma escena (con un discurso del último que pone nudo en la garganta y lágrimas en los ojos). En ese instante el protagonista de este cuento decide (por fin) dejar de huir y el hecho de verle siendo sincero por primera vez con sus hijos acerca de su pasado apunta al cambio que necesita el personaje para salir del pozo y redimirse (bellísimo final con la mirada entre padre e hija).
Realmente esta temporada da para comentar mucho, ha sido un órdago detrás de otro: el funeral de la madre de Roger, la cuenta de Chevy, el affaire entre Don y Betty (soberbia en ese episodio January Jones), la ladrona que se cuela en la casa, la pillada de Sally viendo a su padre ‘consolando’ a la vecina, las vacaciones forzosas que le preparan a Draper, etc.
Ha sido además divertidísima, pero divertida en el sentido del cinismo rallando en crueldad que siempre envuelve a la serie. El surrealista episodio del fin de semana trabajando en la cuenta de Chevy con Draper colocado hasta las cejas se lleva la palma (la escena del bailecito de Ken Cosgrove pasará a los anales) y encima lo cierran con una de las mejores frases pronunciadas por Don Draper: "Cada vez que conseguimos un coche esto se convierte en una casa de putas".
La evolución del personaje de Peggy ha seguido su curso fantásticamente, hasta el punto de encontrarnos en el episodio final con ella ocupando el despacho y la responsabilidad de Don. Elizabeth Moss brilla en su papel, me vienen a la memoria escenas como esa conversación con Pete Campbell celebrando una nueva cuenta, la de Stan contándole que un familiar ha muerto en Vietnam o cuando discute con Joan sobre las distintas formas de ascender en la empresa de cada una.
Jon Hamm tuvo su techo, interpretativamente hablando, en la cuarta temporada de la serie pero ahora podemos decir que ha llegado a un nuevo techo o directamente que se ha salido de él. Ha estado perfecto, debería ganar todos los premios de interpretación que salgan en adelante, solo por escenas como aquella en la que cuenta a Megan como ha sentido por primera vez amor verdadero por su hijo Bobby o su reacción cuando su hija le pilla ‘faenando’... así toda la temporada, espectacular.
Vincent Kartheiser y John Slattery como siempre aportando su indiscutible calidad, sin ellos no me imagino Mad Men.
Deseando estoy de saber como acaba todo.
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Davis | | |
Ficha de Serie de TV enviada por DAVIS el 28 de Junio de 2013 |
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